21-04-2019
La escritura del paseante
Antonio Muñoz Molina
Un andar solitario entre la gente, Barcelona, 2018 (Seix Barral)
Esta obra literaria, bien podría llamarse novela pues en este género
actualmente cabe casi todo, tiene algo de libro de viajes, diario,
autobiografía, reportaje, cuaderno de paseante, crónica de autores peregrinos
por la ciudad y por su propio universo interior...
El personaje, narrador y testigo presencial, es el propio autor no
travestido, que encara el proyecto de observar la ciudad, las ciudades que
habita, caminando por sus calles, recogiendo testimonios visuales, gráficos,
auditivos..., que recopila y alguno de los cuales reproduce en forma de
listados caótico de referencias, tal como los va recogiendo o anotando en sus
cuadernos.
Es una forma de innovar, romper moldes, que al mismo tiempo se reconoce en
precedentes que hicieron algo parecido sin tener plenamente la conciencia de lo
que hacían, a veces fugitivos, figurantes en un escenario en que se sentían
extraños o perdidos.
Por otra parte, es también una obra de denuncia del caos social, ecológico,
psicológico en que transcurre la vida, nuestra vida, ordenada por los dueños de
un sistema que manejan a su antojo y para sus propios fines.
Todo ello produce un extrañamiento aturdido que aturde también al lector,
en muchas ocasiones, mostrándole tal vez el espejo de lo que no quiere ver o de
lo que no se parado en reconocer.
Esta estructura de obra abierta e imprevisible se muestra también en su
presentación tipográfica, con textos generalmente breves encabezados por una
frase en negrita, y cuyo margen derecho aparece sin justificar, para dar una
cierta sensación de texto poético en verso libre, en el que se intercalan
fotografías históricas de los autores referidos en la obra, recortes
publicitarios y collages realizados por el propio autor, como
una manifestación más de su obra que no es exclusivamente verbal.
En muchas ocasiones, el desaliento del paseante narrador se traslada al
lector, así como su asombro, desconcierto y pasión también por el arte, la
literatura y sobre todo por la vida misma, percibida en el límite del asombro.
11-04-2019
Historia y consciencia del Todo
Antonio Muñoz Molina, Tus pasos en la escalera, Barcelona,
Seix Barral, 2019
La última
novela de Muñoz Molina asoma al horizonte del lector con un resabio
aparentemente autobiográfico, de su traslado de Nueva York a Lisboa, pero bajo
esa apariencia se instala la literatura de una época marcada por presagios nada
halagadores y por descubrimientos científicos sorprendentes.
La novela
está construida a partir de una sola voz, la del narrador protagonista que en
un amplio y omniabarcante monólogo interior cuenta su historia, la historia que
él se quiere contar a sí mismo para sostener su ficción, y la de su esposa, una
neurocientífica a la cual alude a cada memento y de la que se siente enamorado
de una forma obsesiva.
Y es que la
obra se construye sobre una base neurocientífica, a partir del miedo y la
memoria, ejemplarmente representados en el cerebro por la amígdala y el
hipocampo. Precisamente el personaje narrador y protagonista en primera persona
describe experimentos que hace su mujer para tratar de borrar la memoria
traumática de ratas que han vivido un fuerte estrés, un encargo que le hace el
Pentágono a una empresa de investigación, para poder borrar el estrés
postraumático a los soldados que han combatido en guerras atroces.
El
conocimiento que tiene el autor de Nueva York, donde ha vivido bastantes años y
de la Lisboa actual, lugar donde se están instalando muchas personas buscando
un paraíso de paz y una vida feliz, nos permite recorrer junto con el personaje
lugares y momentos inolvidables de la vida reciente de estas dos ciudades,
sobre todo los días que siguieron al atentado de las Torres Gemelas, el 11 de
septiembre de 2001.
El
protagonista ha decidió irse a vivir Lisboa como el lugar más adecuado para ver
venir el fin del mundo, cuyo desencadenamiento espera que se produzca en
cualquier momento. Pero antes de su llegada, su propio mundo interior se va
derrumbando, víctima de una enfermedad neurológica que le va privando de la
memoria y de la ubicación en el espacio y el tiempo. Lo que al principio
parecía una historia de amor idílico se va convirtiendo en pesadilla, que el
lector va descubriendo al tiempo que el personaje le cuenta una historia en la
que hay demasiadas lagunas y hechos fantaseados. Cecilia, de la que tanto habla, no acaba de
llegar nunca, pues desde el principio había renunciado a acompañarlo a Lisboa,
hecho que él nunca quiso admitir ni dar por definitivo. Los pasos por la escalera son otros pasos,
los pasos de un presente que el protagonista no quiere reconocer en su
obstinación por mantener una memoria que se va desvaneciendo y lo va confinando
en el ostracismo.
10-04-2019
Equilibrio nocional y emocional