TEXTOS | 07-2012 archivos

Weblog de Manuel Cerezo Arriaza
↑ 08-2012

31-07-2012

Imágenes de lo que fue

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Patrick Modiano, El lugar de los niños (Vestiaire de l`enfance, Paris, 1989), Barcelona, 1989 

Un escritor francés, el narrador protagonista, ha decidido abandonar definitivamente Francia y afincarse en una ciudad costera del norte de África (Túnez). Allí vive solo y redacta un serial radiofónico sobre las aventuras de Luis XVII. En encuentra a una francesa de veinte años, Marie, con la que hace amistad y por la que se siente atraído. Ambos tienen un pasado desconocido y misterioso que el relato irá desvelando. Él huye del sentimiento de culpabilidad que intentaba expresar en sus libros, una culpabilidad sin aparente motivo.

Ha renunciado también a la literatura, ya solo le interesan los nombres de personas de otra época que tiene anotados en tres cuadernos, para tratarlos de sacar del olvido. Son datos que recogió de periódicos antiguos. En la radio, todos los días, el locutor lee durante 10 minutos noticias sobre estas personas y pide a los oyentes que escriban por si pueden aportar algún dato. Pero nadie lo hace.  

Buceando en sus recuerdos reconoce el rostro de una niña cuya madre era actriz y que él sacaba a pasear desde el camerino. Le viene a la memoria como cinco años antes él mismo hacía los deberes escolares en el camerino de su propia madre y un día decidió abandonar el colegio y cambiar de vida.

Los recuerdos empiezan a brotar a su alrededor y le interesa sobre todo confirmar si Marie es la misma niña a la que sacaba a pasear. Va su hotel y la espera en la habitación mientras llega, esta habitación se superpone a la de rue Junot, donde vivía cuando era niña.

Memoria personal

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Patrick Modiano, Un pedigrí (Paris, 2005), Barcelona, Anagrama, 2007 

Libro autobiográfico de sus años de niñez y juventud, hasta el momento en que comienza a adentrarse en la vida literaria. Cuenta su azarosa infancia y adolescencia, aparece la diferente ascendencia y personalidad de sus padres. Sus años de internado, la enemistad con el padre, que quería a toda costa alejarlo de su lado, las relaciones frías con su madre, que lo utilizaba para conseguir dinero. Todo ello podría haberlo llevado a convertirse en un pícaro, alguna faceta desarrolló en este sentido cuando robaba libros por pura necesidad para venderlos después, o en un delincuente. Pero lo salvó la literatura y su talento de escritor juvenil.

A partir de que se publicaran o estrenaran sus obras empezó a vivir su verdadera vida, y la pasada le parece una película o una pesadilla demasiado larga, que vivió esperando el momento en que concluyera, sin una conciencia real de lo que hacía.  

Aunque en todas sus novelas hay fragmentos autobiográficos no aparecen de una forma tan directa y real como en esta obra, en la que por otra parte encontramos los elementos y experiencias necesarias para el desarrollo de su narrativa posterior.

Ha tardado bastantes años en poder escribir una autobiografía tan descarnada y sincera, lo ha hecho cuando tenía ya cincuenta años y estos acontecimientos se han alejado suficientemente de su horizonte vital, sin desaparecer del todo de su memoria.

De esta manera entendemos al escritor que es y podemos comprender mejor las referencias de su mundo literario.

30-07-2012

Texto visionario

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Justino Balboa, William Blake. Un extraño en el paraíso, Madrid, Ártica, 2011 

William Blake emprendió el proyecto de ser un artista total, en el que la expresión visual y plástica se conjugara con la poética, intelectual y mística. Aunque en realidad era un profesional de grabado y la ilustración, aunaba a ello sus ideas liberales, muy avanzadas para su época, y espirituales, de un sentimiento de unión trascendente, basadas en sus experiencias interdimensionales y en sus visiones y sueños.

Que un artista total fuera reconocido en su época con todo su potencial creativo, fue una de las dificultades que tuvo que vencer, sobre todo estando agobiado por conseguir encargos con los que sustentarse. El reconocimiento de sus méritos y valores ha tenido que esperar, no ha sido hasta bien entrado el siglo XX cuando se le ha empezado a reconocer y a entender su obra. Hoy se le considera uno de los grandes artistas ingleses.

William Blake escribía pintaba e imprimía sus libros, que son obras de arte en las que el autor es ejecutor y responsable de todo el proceso de edición. En ellos elabora las relaciones del mundo sobrenatural con el mundo humano.  

28-07-2012

El impresionismo una nueva mirada

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La labor de realizar una panorámica tan amplia y completa de un movimiento que afecta no solo al arte francés sino a todo el arte occidental está muy bien lograda y documentada en esta obra, a la que acompañan las reproducciones de cientos de cuadros. 

El impresionismo es el resultado de otra mirada a las cosas, que las libera de su supuesta apariencia y las plasma en el cuadro mediante la luz y el color, sobre todo en sus facetas más luminosas. Lo que define el cuadro no es la fidelidad al motivo ni la importancia de este, sino la capacidad para verlo artísticamente, constituido en función de sensaciones visuales puramente personales.

Con ello el arte da el primer paso en su alejamiento del realismo, el primer envite hacia la autonomía del arte, liberado de una supuesta fidelidad al modelo. De ahí se va llegando a una cada vez mayor autonomía del arte y de sus obediencias: el arte solo tiene que responder ante la belleza, sea cual sea la estética a la que se aspire.

Este camino contribuye también a darle a la mirada del espectador un papel distinto, no se trata de reconcer la aplicación de un canon de verismo, sino de obtener una complacencia en la vida, las personas y las cosas. El espectador cocrea una obra más esbozada que terminada, que deja un margen amplio para su compleción.

Lo complejo como irreductible

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Edgar Morin, Introduction à la pensée complexe, Paris, Seuil, 2005 

Un ensayo sobre la complejidad como término, que no concepto, que cubre la posibilidad de dar cuenta de lo subjetivo y lo objetivo como un todo, pues el paradigma del que partimos disocia lo físico y lo biológico de lo humano y lo social. Nuestro conocimiento científico, concebido como claro y distinto por Descartes, produce a la vez la imposibilidad de ver, el enceguecimiento, de determinadas realidades que son excluidas para permitir la simplicidad reductiva de unos fenómenos aislados de su contexto. La concepción del sistema abierto a su entorno propone una concepción más capaz de asumir la complejidad.

La teoría de la información proporciona un nexo para vincular lo físico con lo biológico, concebido este como un sistema de auto-organización-reproductiva, que tiene una gran dependencia de su ecosistema. Sin embargo el aparato informativo y matemático no es capaz de dar cuenta de todas las informaciones que se mueven en los organismos vivos.

Hay una hipercomplejidad que relaciona el sujeto y el objeto. Con al teoría de la autoorganización y de la complejidad tocamos los sustratos comunes a la biología y a la antropología. El sujeto autoconsciente, capaz de pensar y concebir el objeto y generar conocimiento integra en sus visiones todo lo que le constituye, la hipercomplejidad. En este paradigma el mundo aparece como un ecosistema de ecosistemas. El sujeto y el objeto aparecen como dos emergencias últimas inseparables de la relación sistémica entre sistema autoorganizador / ecosistema. Dentro del ecosistema hay que situar el ecosistema social, que nos permite contemplarlo desde dentro y desde fuera. 

26-07-2012

El peso del pasado

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Patrick Modiano, Domingos de agosto, (Paris, 1986), Madrid, Alfaguara, 1989 

Una historia que tiene como eje la maldición que pueda aportar un famoso diamante a los que lo poseen. Toda la historia se va narrando a partir de la ciudad de Niza donde se encuentra el narrador protagonista, un fotógrafo de playas fluviales, que se encuentra inesperadamente con el marido de su amante, del que huyó con su mujer, Sylvia, tras una pelea de esta con su esposo. Se llevan consigo el diamante que su marido quería que su madre comprara.

Han pasado quince años desde entonces, pero Villecourt no ha olvidado a Jean y lo persigue por Niza. Llega a esta ciudad costera, llena de personajes de pasado dudoso, su mujer, a reunirse con su amante y se hospedan en una pensión, huyendo siempre de la persecución del marido, al que consiguen esquivar. Conocen a una pareja formada por un supuesto norteamericano, Neal y su esposa inglesa, se hacen amigos, comparten veladas. Esta relación los distiende y olvidan la persecución del marido. Neal propone comprar el diamante y un día los invita a ir a Cannes, paran el coche en Niza y piden a Jean que vaya a comprar tabaco a un restaurante, cuando vuelve ya no están. Desde entonces pierde el rastro de Sylvia, que llevaba consigo el diamante, sin poder encontrarla. Indaga sobre los Neal y se da cuenta de que eran unos impostores amigos de Villecourt, que de esta manera ha conseguido recuperar el diamante y a su esposa. La novela crea una gran intriga en el lector que no puede abandonarla hasta conocer la historia, que el narrador va desgranando lentamente, acabando el relato por dar a conocer cómo había conocido a Sylvia y de qué manera se habían convertido en unos amantes prófugos que consiguieron vivir años como en los felices domingos de agosto. Modiano da muestra de poseer el arte de crear intriga, misterio, haciéndole al lector suponer hipótesis distintas y a veces equivocadas en las que ir encajando los hechos que le va dando a conocer.

Como siempre en sus novelas aparece el siniestro pasado de la resistencia y en este caso las turbias aguas que encenegan el Marne obran como una metáfora de un oscuro pasado. Además todo el relato está lleno de una poética melancolía, que lo impregna todo de un aire de irrealidad, fugacidad y ensueño.

25-07-2012

Relato de la alegría triste

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Patrick Modiano, Villa triste, (Paris, 1975), Barcelona, Anagrama, 2009 

Esta es la cuarta novela del primer ciclo narrativo de Modiano. En ella el protagonista es un joven de 18 años que se refugia del Paris de los años 60, durante la guerra de Argelia, en una ciudad turística de la Alta Saboya, cerca de la frontera de Suiza. Allí se siente seguro, viviendo en una pensión, cerca de hoteles de lujo -que ya no existen-, voluntariamente ajeno a las guerras, para calmar su angustia.

Se encuentra con veraneantes extravagantes y desconocidos, todos ellos alejados de la vida cotidiana, y se mezcla con ellos adoptando un nombre y una identidad imaginaria. Conoce a una actriz novel de cine Yvonne, a cuyo hotel se va a vivir, y se hace pasar por el conde Víctor Chmara. Un amigo de Ivonne, Meinthe, es un supuesto doctor que vive en “Villa triste”. Los tres constituyen los personajes centrales  de la obra, y en cierto modo aparentan una proyección social que no se corresponde con su verdadero estatus, pero eso no importa demasiado en ese mundo en el que se desenvuelven, una sociedad de puras apariencias y pretensiones muchas veces desproporcionadas. Meinthe acaba suicidándose, años más tarde, cuando hacía mucho que Víctor se hubo marchado. Yvonne no lo quiso acompañar a América, con el sueño de convertirse en una actriz y acaba cayendo en manos del ajado seductor de la localidad. Víctor  vuelve a Paris.

La historia está contada doce años después por el mismo personaje, y desde esa distancia se aprecia la fugacidad de una época pasada, el carácter borroso de los recuerdos y la caducidad de un mundo abocado a la desaparición. Ello contribuye a darle al relato ese aire de tristeza melancólica tan característicos de las novelas de Modiano. 

24-07-2012

Memoria familiar

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Patric Modiano, Livret de famille, Paris, Gallimard, 1977

La vida familiar de Modiano es uno de los contenidos más frecuentes de las novelas del autor. Rescatar los recuerdos y experiencias vividas dentro de la familia y las que se han vivido fuera de ella, al ser la suya una familia poco unida y que pronto dejó al joven Patrick a su arbitrio.  

Esa vida familiar tiene como centro la ciudad de Paris, pero también otras ciudades como Burdeos y Bayona, en las que vivió con su hermano menor, fallecido muy pronto y al que le dedica sus primeras novelas. Un apartamento del quai de Conti, en el cuarto piso de un inmueble sin ascensor, les sirvió de vivienda familiar durante un tiempo, y a él vuelve, para contemplarlo, ya vacío, al cabo de los años, con la melancolía y la nostalgia de lo vivido.

Todo se cuenta con precisión, atento a los hechos y a los detalles más aparentemente insignificantes, pero que resultan reveladores para una sensibilidad que en algunos aspectos se acerca a la de Proust en su rescate del tiempo perdido.

Memorias y olvidos a cuatro manos

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Esther Tusquets y Oscar Tusquets Blanca, Tiempos que fueron, Bruguera, Barcelona, 2012 

Leer hoy esta obra escrita por ambos hermanos, en la que de forma alternativa y con afán de plena sinceridad reconstruyen su infancia y adolescencia familiar, resulta especialmente revelador, cuando Esther ha cruzado ya el umbral de este tiempo.

Es también el pasado social y colectivo de muchos lectores que han compartido con ellos unas circunstancias históricas, culturales y políticas muy concretas. Por ello es fácil vislumbrar la identificación y la distancia en muchos aspectos, el reconocimiento de lo colectivo y la apariencia de lo individual.

Es llamativo sobre todo su afán de verdad por encima de toda concesión, hasta donde fuera posible llegar en ella, decir los pequeños delitos abominables, hacer confesiones de hechos indignos, poner de manifiesto, sin piedad, las mentiras piadosas, cuando ya queda lejos el mar de los últimos veranos y la hermana mayor se encuentra varada tras el último naufragio.

Ahora se nos permite a los lectores más de siete miradas al mismo paisaje, y descubrir las invenciones de la niña lunática que ha sido Esther Tusquets, vista también desde la óptica de su hermano menor, el arquitecto y pintor Oscar Tusquets.

23-07-2012

El lugar, la canción, la creación

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Boris Vian, Manuel de Sain-Germain-des-Prés, Paris, Pouvert, 1997

Una guía del mítico barrio escrita en los años 40 por uno de sus más famosos y asiduos protagonistas y completada por su autor en los años 50. Era una época en que Saint-Germain-des-Prés constituía un polo de atracción literario, filosófico, artístico e intelectual. Allí aparecen nuevas corrientes teatrales, de la canción, del cine, de las artes plásticas, de la danza, de la fotografía y de la música contemporáneas. Era la época dorada del jazz interpretado en las cavas existencialistas. La obra se acompaña con numerosas fotografías, que hoy tienen el carácter de documento histórico, entre otras una del propio Boris Vian tocando la trompeta en un club del citado quartier.

El recuerdo y el olvido

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Patrick Modiano, Du plus loin de l´oubli, Paris, Gallimard, 1966

Una historia rescatada del olvido treinta años después por el entonces joven narrador protagonista, siempre de algún modo el propio autor, cuando tenía poco más de veinte años y llevaba una vida precaria comprando y vendiendo libros de viejo, había abandonado la casa de sus padres y se había instalado en un hotel, donde se inscribe como estudiante de letras. Se encuentra entonces por la calle una pareja, Jacqueline y Gérard Van Bever, con los que emprende una relación de amistad, primero, y después de amor con Jacqueline. Ambos eran aficionados al juego. Jacqueline aspiraba éter, cuyo olor fresco y adormecedor envuelve toda la novela como en una nebulosa.

En ausencia de Gérard emprenden un viaje a Londres en donde se hospedan en una pensión maloliente y pasan una temporada allí en compañía de unos amigos ingleses, mientras él escribe una novela. Muchos años después encuentra a Jacqueline en el metro, la sigue, pero no se da a conocer. Entonces investiga sobre ella, y encuentra a otra persona que se parecía mucho a ella, y que tal vez era ella misma. Pero esta vuelve de nuevo a desaparecer y solo queda el recuerdo envuelto en las nieblas del olvido.

La historia de un secreto

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Patrick Modiano, Dora Bruder, Paris, Gallimard, 1997

La lectura ocasional de un anuncio en la prensa sobre la desaparición de una joven, Dora Bruder, de 15 años, le lleva al narrador protagonista, el propio Modiano, a investigar sobre el pasado de esta. Va descubriendo algunas analogías entre la vida de ella y la de él mismo, los dos son de origen judío, ambos se escaparon de sus residencias escolares, por rebeldía y ruptura con unas relaciones completamente insatisfactorias. Pero la vida de Dora Bruder transcurre antes de la segunda guerra mundial, y como judía fue llevada a los campos de concentración, donde desaparece su rastro, mientras que el narrador nació en 1945, al término de esta contienda.  A través de una serie de arduas pesquisas y de azares afortunados va descubriendo las huellas de una desaparecida, sus padres, sus lugares de residencias, sus internados escolares. Se perfila el carácter rebelde de Dora, que va apareciendo ante el lector con una personalidad definida, con un carácter propio. En ella ve reflejada el narrador muchas de sus circunstancias vitales.

Más tarde, cuando tenía avanzada la novela, descubre fotos de Dora y de su familia, que testifican que el asunto de esta no es inventado, sino el producto de una auténtica investigación. Estos documentos fotográficos se han publicado en 2012, en el Cuaderno de L´Herne sobre Modiano.

Pero en la vida de Dora hay zonas desconocidas, meses que pasa fuera de la residencia escolar y de la casa de sus padres, en los fríos inviernos del Paris de la ocupación, en  los que nada se sabe de ella, es el secreto de Dora Bruder, un secreto que nadie podrá robar.

Textos biobliográficos

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Patrick Modiano, Cahiers de L´Herne núm. 98, Paris, 2012 

Uno de los volúmenes de esta editorial dedicado al novelista Patrick Modiano. En él se revisa y comenta su vida y su obra, tras cuarenta años de estar publicando novelas y relatos y haber aportado 24 obras. En el libro aparecen fotografías personales y familiares del autor y una colección de fotos de Dora Bruder y su familia. Contiene interpretaciones de su obra, reflexiones y críticas literarias sobre sus novelas, hechas por en diferentes épocas y por autores muy diversos. El propio autor aporta comentarios sobre su trayectoria. Hay también cartas personales de destinatarios diversos.

Estos cuadernos de la editorial L´Herne tienen un gran valor para los lectores y estudiosos de las obras de los autores que adoptan como objeto de su atención, todos ellos en su etapa de madurez. Sobre todo en el caso de Patrick Modiano, cuya vida  transcurre en un retiro voluntario y en la más íntima discreción.

22-07-2012

La búsqueda de sí mismo

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Patrick Modiano, Accident nocturne, Paris, Gallimard, 2003

Un joven narrador protagonista está a punto de alcanzar la mayoría de edad, entonces a los 21 años, y una noche es atropellado en la Place des Pyramides por una mujer que conduce un Ford de color verde agua. Este accidente supone para él un cambio en su vida, pasar de una existencia desordenada e incierta a otra más consciente y despierta, pero antes tiene que investigar sobre la mujer que lo atropelló y el hombre que le dio una suma de dinero para que olvidara el caso.

Al final la acaba encontrando y mutuamente se reconocen. En él pesa la sospecha de que esta mujer fuera la misma que lo atropelló hace años un día al salir de colegio, aunque esta posibilidad parece improbable.

Esta investigación de la vida y circunstancias de los otros es también un motivo para recordar su propia vida, su familia, las actividades misteriosas de su padre, su madre ausente su vida solitaria y desarraigada. Paris es recorrido minuciosamente sobre todo en el barrio del Trocadero visto desde la nostalgia y una cierta incertidumbre, como si la vida presente se conectara con otras vidas pasadas o paralelas.

Toda la novela está llena de una atmósfera de melancolía y extrañamiento, ese aire típicamente modianesco que transforma lo cotidiano con una poética precisa y misteriosa. El mito del eterno retorno sirve de armazón intelectual para la novela, un mito pregonado por un maestro de pensamiento, el doctor Bouvière.

Abrir las puertas de la percepción

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Aldous Huxley, Les portes de la perception, Paris, Éditons du Rocher, 1954

Un trabajo fruto de las investigaciones que Aldous Huxley acometió en los años 50, bajo control médico, y con una voluntad científica a partir de la absorción de mescalina, un alcaloide activo del peyotl, extraído de un cactus, que proporciona estado de conciencia alterados, visiones de colores y diversos fenómenos psicológicos, con la finalidad de abrir las “puertas de la percepción”, según la expresión de William Blake, a un mundo interior que está al alcance de los místicos.

Estas experiencias las puso en relación con las creencias religiosas, las prácticas de meditación y los esquemas de pensamiento contemporáneos. Llega a la conclusión de que en realidad todos los mitos y creencias parten de experiencias interiores traducidas a expresiones culturales diversas y forman parte de las posibilidades y comportamientos de la psicología humana de todas las épocas.

10-07-2012

La búsqueda de la memoria

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Patrick Modiano, Calle de las Tiendas Oscuras, (Premio Goncourt, 1978), Barcelona, Anagrama 2009 

Un personaje que perdió la memoria cuenta cómo adoptó una identidad, ayudado por el patrón de una agencia de detectives con el que trabajó hasta la jubilación de este, pero no recuerda nada de su vida anterior y ahora trata de encontrar su propia historia.  

La novela relata una investigación detectivesca: la búsqueda del pasado desconocido del propio investigador, una variante no ensayada en la novela de detectives. Va encontrando pistas, a veces se equivoca de persona, hasta encontrar su antiguo nombre, su novia, sus amigos, el lugar donde vivió, las fotos en donde aparece pero en las que no se reconoce a sí mismo. Son los otros los que le van dando datos que permiten reconstruir el puzle de su memoria perdida. Lo acaban reconociendo y así  descubre primero que ha sido un sudamericano que trabajaba en la legación dominicana, llamado Pedro McEvoy, que huyó con su novia, Denise, durante la ocupación para evitar ser detenido. Pero todos esos recuerdos encontrados fuera de su memoria no le evocan nada, no han dejado huella aparente en su perdida memoria. En su investigación el narrador nos hace recorrer numerosas calles y pisos de Paris, descritos con total precisión, ello contribuye a reforzar la verosimilitud del relato.

Después de haber visto las fotos de su época anterior van apareciendo en su memoria escenas fugaces, deshilvanadas de un conjunto que se le escapa. Al recorrer los lugares empieza lentamente a reavivar sus recuerdos perdidos. Le interesa conocer sobre todo qué suerte tuvo Denise. La novela va desvelando lentamente su identidad, en realidad no era Pedro McEvoy sino el marido de Denise, Jimmy Pedro Stern, que había adoptado esa identidad falsa para protegerse. Este había vivido en Roma en la Rua delle Botteghe Oscure, de ahí el título de la novela. Huye con Denise por Suiza, con destino a América. Pero en el paso de la frontera fueron engañados y Pedro quedó tendido en la nieve. Regresaron a Francia, se refugian en Vichy, en espera de poder pasar la frontera por Hendaya. La historia se completa con fragmentos de recuerdos recuperados y pistas que va encontrando. Le interesa también saber qué fue de Freddie, encuentra su paradero en las islas del Pacífico, a donde va pero cuando llega su antiguo amigo ha desaperecido.

Con todo ello solo consigue recuperar algunos pasajes de su vida, pero no sabe del todo quién había sido o si su identidad es la suya o es la de otro. Esta historia insinúa el carácter problemático de nuestra identidad, la dificultad de mantener con fidelidad los recuerdos del pasado, la pérdida de la memoria o el carácter aleatorio e incierto de la propia existencia, cuya persistencia está sujeta a algo tan frágil como el recuerdo.

06-07-2012

Textos del Paris ocupado

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Patrick Modiano, Trilogía de la ocupación: El lugar de la estrella. La ronda nocturna. Los paseos de circunvalación, Barcelona, 2012 

Estas son las tres primeras novelas publicadas por Modiano, en donde se desarrolla la angustia y la culpa de una ocupación consentida, sentida y vivida por alguien que nació después de ella pero en cuya familia, judía, pesa todavía las huellas de un pasado que sigue estando vivo en la memoria.

El lugar de la estrella (1968), su ópera prima, la presentó a Gallimard cuando tenía 22 años y fue celebrada por Raymond Queneau, lector de la editorial, que la propuso como la obra mágica y sorprendente de aquel joven judío. Tuvo que esperar su publicación a 1968, para evitar la coincidencia con la guerra de los seis días. En ella el narrador protagonista es un judío colaboracionista y antisemita que está dispuesto a cualquier desmán a favor propio y de sus vengativas ideas. Esta aguda ironía tiene como fondo vital para el autor el turbio pasado de su padre durante la ocupación, el cual  sobrevivió gracias a su colaboración con los alemanes, todo ello antes de que hubiera nacido Patrick. Esta novela lanzó al joven novelista a la fama y le hizo acreedor de un premio literario. En ella desfilan toda la galería de escritores antisemitas franceses, de los que el protagonista se hace devoto seguidor, en el colmo de la ironía y la denuncia.

La ronda nocturna (1969) es casi una continuación de la novela anterior. Nos sitúa en el París de la ocupación y en concreto en una pandilla de gánsters que se dedican a perseguir a la resistencia y a lucrarse con negocios ilícitos. En esta pandilla está el joven narrador, que con su cara de buena persona, es utilizado por los miembros de esta pandilla para infiltrarse en la resistencia y hacer de espía doble y delator. Por su parte los miembros de la resistencia lo aceptan como uno de ellos y le encargan un atentado para liquidar a los gángsters. Él se debate entre ambos bandos sin identificarse con ninguno de ellos pero tratando de sobrevivir.

Los paseos de circunvalación (1972) la historia se desenvuelve en los alrededores de París, en un ambiente de aristócratas dudosos, gángsters y periodistas de frivolidades y chantajes, entre ellos está el padre del narrador protagonista, un joven novelista, Alexandre, que observa ese ambiente turbio con curiosidad y desprecio. Le ha costado bastante tiempo localizar a su padre y ahora que lo ha conseguido quiere indagar en el ambiente en que se mueve y sobre todo cuenta la vida de su padre, del que sabe algunas cosas que han vivido en común y otras que trata de averiguar. En esta narración se adivinan diversos elementos autobiográficos. En su vida en común con su padre Alexandre le ayudaba escribiendo dedicatorias falsas sobre libros antiguos, que luego vendían a precios elevados. Esta parte de la novela transcurre en París, visto en conjunto, pues se habla de todos los barrios y rincones, que padre e hijo recorrían cada tarde. Una de esas tardes, en medio de la multitud, su padre lo empujó para que cayera en el andén del metro, pero pudieron salvarlo. A partir de ahí el padre desapareció y volvió a encontrarlo diez años más tarde en ese lugar de los alrededores de París.     

Estas tres novelas están concebidas como una investigación, una búsqueda de una época o de un personaje. En ellas destacan las referencias a la literatura, a la poesía y sobre todo a la música y a las letras de canciones del momento, cuyos versos aparecen citados. No es extraño este hecho, pues sabemos que en esta época Modiano compuso algunas letras de canciones, entre otras para Françoise Hardy.   

03-07-2012

LA FUGA DEL TEXTO

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Sergio Pitol, El arte de la fuga, Barcelona, Anagrama, 2ª ed. 2005

Colección de artículos y trabajos sobre la memoria, la escritura y la lectura, en los que Sergio Pitol demuestra su amplia cultura y sus viajes e inquietudes de escritor y lector, que busca descubrirse a sí mismo en los textos de los demás.

Sorprende el vasto culturalismo de este escritor mexicano que uno pensaría más anclado en sus particularidades nacionales o ancestrales, pero en el que desborda ante todo la cultura europea entendida con más sagacidad que la empleada por los propios europeos, más limitados por escuelas o tradiciones.

Como Borges, se asoma a todos las escrituras, siguiendo la estela de su paisano Alfonso Reyes, pero su inquietud no se agota en la erudición o en la memoria sino que busca el deslumbramiento de lo insólito o insospechado.

Todo ese magma cultural podría sepultarlo, pero Sergio Pitol puede despejar su panorama mental de recuerdos y lecturas y quedarse solo en la perplejidad o la desolación.

Al final queda el descubrimiento de la nada, el vacío o la superación de todas las apariencias sin las cuales nada seríamos y con las que en el fondo nada somos.

Por eso sus recorridos en la experiencia y en la memoria, que causarían el asombro, la admiración o la envidia de no pocos, transitan buscando la fuga, el abandono, el no quedarse atrapado por nada, a sabiendas de que nada hay más grato que la libertad y el vuelo. Podríamos por ello acusarlo de diletante o desamparado, y no estaríamos equivocados, salvo en lo esencial, Pitol no se deja atrapar, ni siquiera por sí mismo. Queda una certeza, nada más estéril que intentar imitarlo, nos quemaría la luz de su ironía.

02-07-2012

Opera prima al final del camino

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José Saramago, Claraboya, Barcelona, 2012 

La lectura de los inéditos póstumos cobra un sentido diferente al que hubieran tenido de haberse podido leer en su momento. Ahora son una alargada sombra que se proyecta desde un árbol ya inexistente, pero que trazan el primer paso en un camino que parecía haber comenzado más tarde o de otro manera. Sobre todo cuando no son textos de aprendizaje, sino óperas primas inéditas en su momento, debido a la opacidad de un autor novel. 

Aquí encontramos ya a un novelista completo, que sabe enmarcar personajes en un contexto familiar y social y mostrar sus limitaciones y frustraciones en un medio sin horizontes ni esperanza, más allá de la supervivencia cotidiana.

Es una novela inscrita en el realismo social portugués, de su momento, que nos puede recordar otras novelas semejantes del realismo español de los años cincuenta. Donde, debido a la censura de dictaduras homólogas, no se podía decir todo ni hablar con transparencia.

Como en el drama de Buero Vallejo, El Tragaluz, la Claraboya es la esperanza que podría iluminar una existencia estrecha. La luz que brinda no es la del amor o la comprensión, pero sí la de la lucidez que explica los conflictos en que se debaten los personajes.

Saramago era ya un novelista entero, en espera de que se abriera ante sus ojos la luz de la publicación editorial, algo que no consiguió para esta novela aunque ahora se ha visto iluminada por los destellos creativos de toda su obra posterior. Al final se abrió la claraboya para su ópera prima.

↓ 06-2012